![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPBGzxBJSWIlMTmjgTCXuUZD4JZLeCIMTo_QMvhqlvmakZLFIcY0nYvWHxykQhHlQIycu5IbdMz0BpCCEeY4Mzmy3sui1HVnydEq-6j_w7eA26XtrG9Dahsw1B_OkCWOxjUzFBODVBEJrZ/s400/ciudad.aspx)
Sabés? Me gustan las ambulancias...
Bueno...no las ambulancias en sí,
¿Sabés que es lo que realmente me gusta de ellas?
Ese código silencioso que mantiene con el resto de los automóviles cuando enciende la sirena...
Es como un lenguaje, un lenguaje callado.
A veces pienso que hablaran entre ellos...
Como si la ambulancia les pidiera permiso y todos los demás le respondieran cortézmente sabiendo muy bien que es lo que tienen que hacer...
- Permiso...tengo que pasar...permiso...tengo que llegar rápido...
-sí, esperame que encuentro un huequito
-sí, ya me corro un poquito para acá
-Vamos che...la Ambulancia necesita pasar...
-gracias, gracias, les agradezco en verdad a todos...
Es todo muy ameno...todos se corren, le dejan espacio
sin importar semáforos, señales, egoísmos propios.
Todo eso lo dejan a un lado.
Saben que es lo importante.
Y en ese momento, todo lo demás se pierde, se va.
cuando escucho una sirena de ambulancia me quedo estática,
mirando el baile armonioso,
silenciosamente codificado,de todos los automóviles.
Me hace sonreír esa imagen entre la cotideaneidad de la ciudad