No te encuentro, no te veo.
Admito que tampoco te busco demasiado,
porque creo que así lo prefieres.
Pero a mi me duele no saberte...
Me dan ganas de escucharte, de esperarte, de cruzarte.
Porque quiero que sepas que era lo que quería decirte,
y no que me dejaras así, sintiendome tan nada.
¿Tanto costaba que nos sentáramos a charlar un rato?
¿Sabes? lo siento, de verdad.
Siento que doliera, y que la distancia sea la salida.
Y si aun no sabes nada de mí, es porque simplemente, no me has dejado más opcion que ser invisible.
3 comentarios:
UH, una sensación tan conocida!!!!!!
Excelente!, me encuentro en la posición de invisible actualmente, y no veo la hora de hacerme conocer para que las cosas sean diferente!
Besos.
hace dos días, una mujer maravillosa me pidió que desapareciera, con todo el cariño, y con todo el cariño desapareceré.
Sigo leyendo....
Saludos y un abrazo
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